jueves, 29 de mayo de 2008

EL AMIGO MÁS FIEL


Un perro fue visto en medio de una transitada avenida
cuidando a su amigo que fue atropellado por un carro.Usando la pata, el perro trataba de despertar a su amigo que ya estaba muerto.






El perro trataba de empujar a su amigo fuera de la carretera.



Cuando la gente trataba de ayudar, les ladraba y ahuyentaba al que se acercara a él.A pesar del tráfico pesado, el perro no abandonaba a su amigo.






Los testigos quedaron impresionados de como un perro ordinario puede ser tan leal!En situaciones como esta, es cuando sabemos quien es un verdadero amigo.





Ellos tienen sentimientos, no los maltrates, no los abandones. Ellos jamás lo harían.

miércoles, 28 de mayo de 2008

POR NUESTROS AMIGOS

Hola a todos se q es ultimamente pongo cosas tristes,pero esq es lo q me rodea x cada sitio q miro,es increible como habiendo tanta gente q damos tanto cariño y amor a nuestras mascotas q se han conseguido meter como una mas de nuestras casas,hay gente q puede ser tan cruel,no se si conseguire q se vea el video pero esq de verdad q me ha gustado mucho,una lastima q yo sea tan torpe para estas cosas,pero espero q si se vea,
BESOS A TODOS VOY A VER SI LO LOGRA.Lo pongo ademas xq estan buscando firmas parq q no les cambien de sitio,en el video se puede ver y en la pagina de la protectora se puede firmar via internet espero q lo hagais muchos lametazos.


Esta es la pagina donde podeis firmar si lo deseais, espero que si

http://www.efirmas.com/14772/index.html

sábado, 24 de mayo de 2008

Mi prima Lua


Hola! Os quiero presentar a mi primita, Lua, una beagle, que ya lleva unos meses en la familia. Vive en Zaragoza, y eso no me gusta, porque no puedo jugar mucho con ella, pero por otro lado, creo que esta bien, porque estoy casi segura de que aprenderia a quitarme la pelota enseguida, como ha aprendido Zira y casi todos los perros del mundo.

Lua es la primera prima de pura raza que tengo, porque en mi manada, siempre han ido recogiendo perritos abandonados y todos hemos sido unos mil razas de lo más simpáticos; yo sólo espero que Lua salga igual de simpática y buena que todos mis amigos del parque y que podamos correr juntas pronto por el campo (y que no se vuelva muy pija, que ya veis que le han comprado una camita de Kutxumutxu).

Besos, Nana

jueves, 22 de mayo de 2008


Esta es una historia para los amantes de los perros.
Erase un chico que vivía sólo con su perro. Este era ya muy mayor y tenía continuos achaques. Había sido, como todos ellos, un compañero fiel y leal y un amigo entrañable. Por eso, el hombre se encontraba bastante triste porque veía que el final se acercaba.
Por motivos de trabajo inexcusables, y muy a su pesar por tener que abandonarle, el chico tuvo que irse 15 días fuera. Dejó al animal al cuidado de unos amigos de su entera confianza advirtiéndoles de su delicado estado de salud, y emplazándoles para que al menor síntoma de empeoramiento le llevaran raudo al veterinario.
El caso es que a los dos o tres días de marcharse, el perro se empezó a encontrar mal. Le llevaron al veterinario y éste, ante el estado en que se encontraba y dado que no había posibilidades de curación les planteó ponerle una inyección que acabara con su vida. Los amigos, indecisos por tomar una decisión tan drástica sin conocimiento de su dueño, le preguntaron si el perro estaba sufriendo a lo que les respondió que probablemente no, y que tampoco pasaba nada si se lo llevaban de nuevo a casa y le instalaban cómodamente porque lo más probable es que moriría de muerte natural en las próximas horas.
Así hicieron y se llevaron al perro de vuelta a casa. Pasaron las horas. El perro yacía, aparentemente tranquilo, en un lugar confortable de la casa. Apenas se movía, ni comía ni bebía. Entre varios lo sacaban a la calle para que hiciera sus necesidades, cosa que hacía con gran dificultad.
Pero el perro seguía vivo y aparentemente no sufría por lo que la idea de la inyección letal fue desechada completamente al menos hasta que el dueño regresara. El veterinario llamaba por teléfono puntualmente sorprendido de que el perro aguantase con vida.
Finalmente, llegó el día del regreso del dueño. El perro llevaba una semana con los imperceptibles movimientos de su respiración como única señal de que seguía vivo. Decidieron montarle en el coche para que le acompañara al aeropuerto y su amo viera en qué estado se encontraba el pobre.
Una vez en el aeropuerto, el perro se quedó en el coche al cuidado de uno de ellos y los otros fueron a recibir al que llegaba y a contarle lo que sucedía. Arribado este y puesto en antecedentes, corrió al coche a ver el estado de su viejo amigo. El perro, alertado por sus sentidos de quién venía, saltó como un resorte del asiento del coche y corrió ladrando como loco con un fuelle milagrosamente recuperado tras tantos días de lenta agonía. El recibimiento fue épico con los dos amigos abrazados llorando.
En el viaje de vuelta del aeropuerto a casa, acostado el perro sobre las piernas de su dueño, decidió que ya había aguantado bastante y, emitiendo un suspiró algo más fuerte de lo habitual, murió en sus brazos. Había conseguido despedirse de su amigo y había muerto en paz.

jueves, 15 de mayo de 2008

EL CIELO Y LA AMISTAD


Un hombre, su caballo y su perro caminaban por una calle. Después de mucho andar, el hombre se dio cuenta que tanto él, como su caballo y su perro habían muerto en un accidente (a veces los muertos se toman su tiempo para comprender la nueva condición). La caminata era muy larga, montaña arriba; el sol era fuerte, y ellos estaban cansados, sudados y tenían mucha sed. Necesitaban desesperadamente agua. En una curva del camino vieron una puerta magnifica, toda de mármol, que conducía a una plazoleta con piso de oro, en el centro de la cual había una fuente de la que manaba agua cristalina. El caminante se dirigió al guardián que, dentro de una ornamentada casilla, vigilaba la entrada. - Buenos días, le dijo. - Buenos días, respondió el guardián. - ¿Qué lugar es este, tan lindo? preguntó el hombre. - Este es el Cielo, fue la respuesta. - ¡Qué suerte que llegamos al Cielo! Estamos con mucha sed, dijo el hombre. - Pues, puede usted, entrar y beber agua a voluntad, contesto el guardián, indicándole la fuente. - Mi caballo y mi cachorro también están sedientos, comentó el hombre. - Lo lamento mucho, dijo el guardián, pero aquí no se permite la entrada a los animales. - Pero ellos me han acompañado siempre, dijo el hombre. El guardián se limito a menear la cabeza negativamente. El hombre quedo muy desilusionado, porque su sed era grande, pero decidió no beber si sus amigos no podían hacerlo. Asi que prosiguió su camino. Después de mucho caminar montaña arriba, con sed y cansancio multiplicados, llegaron a un sitio cuya entrada estaba marcada por una vieja puerta entreabierta. La puerta se abría hacia un amplio camino de tierra, con verdes árboles a ambos lados que brindaban buen cobijo del sol. A la sombra de uno de ellos había un anciano de blanca barba, apoyado sobre el tronco; parecía adormilado, con la cabeza cubierta por un sombrero. El caminante se aproximó. - Buenos días, le dijo. - Buenos días, respondió el anciano. - Estamos con mucha sed, mi caballo, mi perro y yo. ¿Hay algún lugar donde podamos encontrar agua?. - Detrás de aquellos matorrales hay un manantial, contestó el anciano. Pueden beber a voluntad. El hombre, el caballo y el perro fueron hasta el manantial, y finalmente pudieron calmar la sed y refrescarse. Al volver hasta donde estaba el anciano, el hombre le agradeció. - Pueden volver cuando quieran, fue la respuesta. - A proposito -dijo el caminante- ¿cuál es el nombre de este lugar? - Estan en el Cielo, contestó el anciano con una sonrisa. - ¡Pero no es posible! exclamó el hombre. - El guardián que estaba al pie de la montaña, junto al gran portal de mármol, nos dijo que el Cielo era aquel! - No, aquello no es el cielo, es el infierno. El caminante quedo perplejo. - Pero entonces ... esa es una informacion falsa, y puede causar grandes confusiones!!! - De ninguna manera, respondió el anciano. - La verdad es que ellos nos hacen un gran favor, porque allá se quedan aquellos que son capaces de abandonar a sus mejores amigos.

sábado, 10 de mayo de 2008

La pata colgando

La pata coja colgando, como una inútil piltrafa, pasó el perro por mi lado.
Un perro de pobre casta, uno de esos, callejero, pobre de sangre y de estampa, nacen en cualquier rincón de perras tristes y flacas, destinados a comer basura de plaza en plaza. Si pequeños por el qué, fino y ágil de la infancia, baloncitos de peluche, tibios borlones de lana los miman, los acurrucan, los sacan al sol, les cantan ... de mayores, por el qué conque se les fue la gracia, los dejan a su ventura, mendi
gos de casa en casa, sus hambres por los rincones y su sed sobre las charcas...

¡Y que tristes ojos tienen! ,
¡Qué recóndita mirada!, como si en ella pusieran su dolor a media asta ... y se mueren, de tristeza, a la sombra de una tapia si es que un lazo no les da una muerte anticipada.

Yo lo llamo: - ven, no te hago nada - todo hociquito curioso, toda sed, hambre, nostalgia. Un perro si se le llama, huele la voz esperando, pan, caricias o pedradas, no en vano lleva marcado un mal recuerdo en su pata.

Lo vuelvo a llamar ... , dócil a medias, avanza, moviendo el rabo con miedo y atrás las orejas gachas ... Chasco los dedos le digo - ven aquí, no te hago nada ,vamos , vamos, ven aquí - ... y ¡adiós a la desconfianza!, que ya se tiende a mis pies, a tiernos aullidos habla, ladra , para hablar más fuerte, salta, gira, gira, salta, lloran, ríen, ríen lloran, lengua, orejas, ojos, patas y el rabo es un incansable abanico de palabras ... Es su alegría tan grande que estoy seguro que canta

Alguien le ha dicho - ven aquí, no te hago nada. Y le nacen de alegría aullidos como palabras. Sólo su patita coja, no puede decirme nada - ¿ que piedra te dejó cojo?, si, si ¡malhaya, malhaya! ... el perro me entiende, sabe que estoy maldiciendo la pedrada, esa pedrada dura que le destrozó la pata y con el rabo me está agradeciendo la lástima.

- Pero tú no te preocupes , ya no te faltará nada, yo también soy callejero, bien que de distintas plazas y a patita coja y triste, voy de jornada en jornada, las piedras que me tiraron, me dejaron coja el alma entre basuras de tierra tengo mi pan y mi almohada ... Vamos pues perrito mío, vamos ¡anda que te anda!, con nuestra cojera a cuestas con nuestra tristeza en andas; yo por mis calles oscuras, tú por tus calles calladas, tú la pedrada en el cuerpo, yo la pedrada, en el alma ... y cuando mueras amigo, yo te enterraré en mi casa, bajo un letrero que diga: - aquí yace, un amigo de mi infancia - Y en el cielo de los perros, pan tierno y carne mechada, te regalará San Roque, una muleta de plata - ...

Compañero, si los hay, amigo, dónde los haya, mi perro y yo por la vida, pan pobre, rica compaña.

Era joven y era viejo, por más que yo lo cuidaba, el tiempo malo pasado lo dejó medio sin alma, fueron muchas hambres juntas, mucho peso para sus tres patas.

Y una mañana, en el huerto, debajo de mi ventana, lo encontré, tendido, frío, como una piedra mojada ... Como un duro musgo, el pelo con el rocío brillaba. Ya estaba mi pobre perro muerto de las cuatro patas. Hacia el cielo de los perros, se fue, anda que te anda, las orejas de relente y el hociquito de escarcha ...

Portero y dueño del cielo, San Roque en la puerta estaba, ortopédico de mimos, cirujano de palabras, bien surtido de recambios con que curar viejas taras: - Para ti tu rabo de oro, para ti un ojo de ámbar, tú tus orejas de nieve, tú, tus colmillos de escarcha, tú ... - y mi perro le reía - , tú, ... ¡tu muleta de plata! ...

Ahora ya sé, por que está la noche agujereada, ¿estrellas? , ¿luceros? ¡ No ! es mi perro que cuando anda, con la muleta va haciendo, agujeritos de plata ...

q bonito es mi perro

bueno no es nada simplemente kiero provar xq me han tenido q borrar del log y no se como ha kedado besos.

Uno menos de la pandilla Terry

Terry era discreto, todos le echaremos de menos se fue no sabemos el ¿por que? Ramón me dijo que no me preocupase que donde estuviese ahora seria mas feliz, yo le creo, pero su discreccion cuando le ladraba y que nunca se metia conmigo, le hacia un perro muy especial, este sentimiento de tristeza estoy seguro que lo compartiran todos los perr@s del parque San Roque.
Nosotros no lloramos porque ya lo hacen los humanos que estan con nosotros, aunque no se porque lloran, si Terry esta en un sitio mejor. Gracias Tito por presentarnos a Terry.
Era un Pastor Alemán, dice Ramón que era majestuoso y con una gran presencia, ha pasado por muchas visicitudes, tuvo 2 tumores, yo no se lo que es eso por mucho que me lo explican, yo nunca le olvidare era de la MANADA Y CUANDO SE ES DE LA MANADA , se es para SIEMPRE.

GRACIAS TERRY NO TE OLVIDAMOS NI TAMPOCO A LINDA NI
KYRA, LA MANADA SIGUE...................................

viernes, 9 de mayo de 2008

Nos fuimos de puente

El pasado puente nuestros papis nos llevaron al campo, llegamos por etapas, primero, Luna y yo (Nana) el sábado vino Zira, y el Domingo Blacky. Pasamos unos dias estupendos, en el que pudimos andar, relacionarnos y jugar. El carácter de Luna es muy fuerte a pesar de que es mi casa, ella se apropió.
Hechamos en falta a muchos de nuestros amigos y espero que para la proxima puedan venir y divertirse con nosotros.

jueves, 1 de mayo de 2008